Descripción
A partir de los 6 meses, el bebé puede comenzar a rodar las pelotas y explorar sus distintas texturas. Cada pelota, con un tamaño adaptado a las manos pequeñas y una superficie táctil única, le invita a descubrir nuevas sensaciones, estimulando la sensibilidad al tacto y la coordinación ojo-mano.
Cuando el bebé empieza a sentarse, podrá apilar las pelotas y crear torres. Además, al ensamblar sus partes para formar nuevas figuras, desarrolla su motricidad fina, coordinación y destreza.
Más adelante, descubrirá el principio de las muñecas rusas: las pelotas encajan unas dentro de otras, lo que fomenta la paciencia, la perseverancia y la precisión de los movimientos.
Fabricadas en 100 % silicona, son suaves, seguras y perfectas para jugar en el agua. Se pueden lavar en la lavadora en programa frio
Medidas: Ø 8,4 cm, Ø 6,9 cm y Ø 5,3 cm.
